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Informe ERM 2018: Impacto de las reestructuraciones en las condiciones de trabajo

IKEI ha formado parte del equipo técnico liderado por TNO Innovation for Life que ha elaborado el Informe del European Restructuring Monitor 2018 de Eurofound, centrado en el impacto de las reestructuraciones empresariales en las condiciones de trabajo.

Utilizando los datos de la sexta Encuesta Europea de Condiciones Laborales (EWCS), realizada en 2015, el informe ERM 2018 de Eurofound (Fundación Europea para la Mejora de las Condiciones de Vida y Trabajo, agencia de la Comisión Europea) examina los factores que influyen en la relación entre una reestructuración empresarial (con pérdidas de empleos) y los efectos para los empleados/as que permanecen en la empresa. También revisa la investigación política y académica sobre buenas prácticas en la reestructuración. Las conclusiones se resumen en un modelo que puede contribuir al diseño e implementación de medidas efectivas para respaldar a los trabajadores/as. Los elementos de buenas prácticas se ejemplifican en estudios de caso de cuatro países (Bulgaria, Alemania, Países Bajos y España) que muestran diferentes enfoques.

La reestructuración es una característica común de los mercados laborales y la organización del trabajo. De acuerdo con los resultados de la encuesta, cerca de un tercio de los/as empleados/as en la UE experimentaron algún tipo de proceso de reestructuración en sus empresas en los tres últimos años. Si bien pueden ser necesarias para la supervivencia y el crecimiento de las empresas, las reestructuraciones suelen tener un alto coste para las personas que trabajan en las mismas, incluyendo a quienes se quedan,  los/as "sobrevivientes" que logran conservar sus empleos. Entre este colectivo y de acuerdo con el estudio, tanto la reestructuración como la reducción de personal se asociaron con niveles más altos de intensidad de trabajo, exposición a comportamientos sociales adversos (bullying, discriminación, etc.) y niveles más bajos de satisfacción con las condiciones de trabajo. Sin embargo, la reducción de personal también se asoció con una mayor nivel de capacitación provista por el empleador y de trabajo cognitivamente rico, lo que sugiere que también puede haber elementos positivos en algunas de las dimensiones del trabajo relacionadas con el capital humano.

(Acceder al informe)